Liu R et al.
Journal of Musculoskeletal and Neuronal Interactions
Vol. 10, nº 1, March 2010
La reparación ósea es un fenómeno complejo que incluye varios tipos de células y factores señalizadores. En la actualidad existe evidencia sustancial de que las células madre originarias de tejidos óseos locales, particularmente del periostio, pueden contribuir a la reparación ósea. Es sabido que hay situaciones en las que la lesión o un tratamiento quirúrgico pueden producir una depleción o una falta de acceso a esos progenitores. El hecho de que incluso en esa situación se produce reparación ósea, nos lleva a pensar en la existencia de algún sistema secundario de tipo compensatorio. Una fuente potencial alternativa de osteoprogenitores es el músculo, que además de estar fuertemente asociado con el hueso, sufre de forma habitual en el curso del traumatismo o intervención. Se sabe que el acceso al músculo es benéfico en la reparación ósea, lo que tradicionalmente se ha atribuido a la alta vascularidad del músculo y, por tanto, su participación en el aporte sanguíneo local.
Sin embargo, en estos momentos hay evidencia creciente que sugiere que los progenitores de origen muscular pueden intervenir de forma directa en la reparación ósea. Por tanto, definir el papel del músculo en la formación y reparación del hueso tiene implicaciones clínicas significativas, sobre todo el hecho de que promover el acceso a este tejido pueda incrementar los resultados del fenómeno reparador.
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario